Por lo general, las máquinas de coser no precisan de grandes necesidades en cuanto a su mantenimiento, pero no por ello debemos descuidar la realización de determinadas acciones que harán que la máquina nos dure muchos años.
Evidentemente, ni que decir tiene, es conveniente que los accesorios que utilicemos sean de buena calidad de manera que evitaremos roturas frecuentes en dichos accesorios y en las labores que estemos realizando. Así, procuraremos utilizar en nuestras máquinas un buen hilo y unas buenas agujas que proporcionen a nuestro trabajo fluidez y estabilidad.
Aconsejamos realizar una limpieza regular de tu máquina con el fin de favorecer el buen funcionamiento de sus partes móviles, quedando estas libres de polvo y pelusas.
Para ello es aconsejable realizar la limpieza de la canilla y su lanzadera. Lo que haremos en este caso es levantar la aguja, retirar el prensatelas y retirar la placa de aguja. Después abrimos la tapa que aloja la canilla y la extraemos tirando de la lengüeta. Se abre el soporte del anillo de la lanzadera y se extrae.
A continuación, con un cepillo y un paño húmedo, limpiamos de polvo y pelusa todas las partes sucias del canillero así como los engranajes. Podemos usar también un spray de aire comprimido para soplar los restos que no hemos retirado con el cepillo y el paño.
Una vez esté todo limpio, procederemos a engrasar la máquina haciendo hincapié en las partes móviles que más sufren el rozamiento. Para extender el aceite, pondremos en funcionamiento la máquina lo que hará que se reparta bien el aceite por los engranajes. Cuando hayamos terminado retiraremos el exceso de aceite con un paño y colocaremos las piezas de nuevo en su sitio.
Es aconsejable que mantengamos la máquina tapada con una funda a fin de evitar que se llene de polvo.
Os dejamos un vídeo que explica muy bien todo lo que os hemos explicado antes sobre el mantenimiento de la máquina de coser.
